jueves, 27 de diciembre de 2012

Equipaje Ligero


¿Qué equipaje se necesita para un paseo de 5 días? No mucho… ¿verdad?.........

Error!

La lógica femenina dicta que debemos buscar la manera de que todo el apartamento nos quepa en la maleta de mano. Suena poco práctico e improbable, pero pocos momentos pueden causar tal crisis como el momento de preguntarnos ¿Qué puedo necesitar?.

¿Qué puedo necesitar? Pues todo! Tengo que prepararme para el frío, para el calor, para cuando no haya tanto calor pero tampoco llegue a ser frío. Debo llevar zapatos con los que pueda caminar, ¿pero que pasa si no me combinan con toda la ropa? ¿Llevo los zapatos que necesitan medias? ¿Y si hace mucho calor para ponerse medias? ¿Llevo suficiente ropa interior? ¿Suficientes franelas? ¿Y si me cae comida encima? ¿Y si me defeca una gaviota? ¿Y si trato de saltar una cerca y se me queda enganchado el pantalón dejándome con la ropa rota en el medio de la calle y y y y….? Pfffffff me asfixié!

Lo cierto es, que uno pasa tanto tiempo comprando cosas que necesita, que es muy difícil hacer una predicción de cuál de todas esas cosas te va a faltar en el viaje. Hay probabilidades altísimas de que alguien se doble un tobillo y tú digas “en mi casa tengo bastante voltaren”. Y eso es lo que uno intenta evitar, pero la cosa se convierte en una experiencia de desapego con los ítems dejados atrás.

Una vez superada la etapa de las decisiones, viene la parte de la distribución de los artículos esenciales. Por ejemplo: la almohadita de cuello, el shampoo, acondicionador, crema para peinar, cera para moldear, jabón, jabón facial, afeitadoras, crema humectante, humectante facial, protector solar, bronceador, crema de dientes, cepillo de dientes, desodorante, solución para lavar los lentes de contacto, estuche de los lentes de contacto, lentes de montura por si acaso….. lo básico pues!

Ah pero…. Debería meter también unas curitas y algo para el dolor de cabeza, mmmmm ¿será que me llevo este teragrip? Sí, uno nunca sabe quién se enferma. ¿Y si se me tapan los oídos? Mejor me llevo unas gotas, bueno y ya que voy a llevar esto termino de armar el kit de primeros auxilios, por si acaso.

Por si acaso, por si acaso, por si acaso…. Por si acaso termina uno necesitando unos baúles de esos que llevaba la gente del Titanic! No puede ser que uno no valga nada sin una crema para peinar o una afeitadora! Pero dígame usted si uno va a disfrutar sus vacaciones con el cabello como un león o con las piernas peludas…… no se puede! Es imperativo conseguir el espacio para todo ítem que uno anticipe que pueda o no necesitar.

Es absolutamente necesario buscar espacio para los cargadores de cuanto dispositivo móvil se esté llevando. Hay que buscar espacio para el maní del camino, para la botella de agua, para el sweater, para las cartas de UNO, para todo!

De tal manera que el viaje no comienza al agarrar camino, no no no! El viaje comienza antes, en nuestra mente lanzándonos una de Adriana Azzi y ver el futuro para poder hacer la maleta.

Eso si, no se hagan esperanzas, porque TODAS vamos a llegar a nuestro destino y nos daremos cuenta de que faltó la toalla, no metimos medias, se quedó el peine para desenredarse el cabello o sólo metimos la sandalia del pie izquierdo.

Que difícil esta época de equipaje ligero, que difícil!

martes, 25 de diciembre de 2012

El Enemigo Secreto


Si hemos tenido alguna interacción social durante el año, es muy probable que en diciembre tengamos un papelito con nuestro nombre listo para un sorteo. Y no estoy hablando de rifas ni promociones, estoy hablando del temible amigo secreto.

El concepto del juego es que cada quien tome un papelito con el nombre de alguien a quien debe darle un regalo. Dicho nombre debe permanecer secreto hasta el día del intercambio. Lo que no es un secreto es que a menos que sea un grupo muy unido y consciente de los gustos de otros, el juego se torna en una pesadilla.

El primer paso para dar un regalo adecuado es invertir un mínimo de tiempo en considerar a quien va dirigido. Parece algo tácito pero no lo es, evidencia de ello la cantidad de bufandas floreadas, batas y prendas llamativas que he recibido en mi vida.

Mi teoría es que mucha gente tiene la tendencia de comprar regalos como si fueran para ellos mismos. He allí el primer error en una serie de errores. Si a usted le toca comprarle algo a un Emo por ejemplo, ¿cuántas probabilidades hay de que le guste un hermoso vestido naranja?... ninguna! Por favor entendamos que darle un regalo a alguien no debe convertirse en “lo que a mí me gustaría que usaras”. Para eso están los makeovers.

Ojo, el regalo equivocado no siempre viene con mala intención, pero sí de la falta de atención o de nuestro propio gusto por el artículo en cuestión. Lógicamente es difícil que te guste todo lo que te regalen, más si la persona no te conoce. Pero cuando se trata de algo absolutamente opuesto a ti y viene de gente que ves todos los días del año, ya eso es incomprensible.

De tal manera que no se trata de ser malagradecido, sino de tratar de cortar ese ciclo eterno de regalos inadecuados. Por lo tanto no, no puedo fingir que usaré esos zarcillos de piedras colgantes hasta el cuello que me regalaron, ni la bufanda de seda vinotinto con flores rosas y amarillas, ni aquel chal con hilos dorados que hoy funciona de tapetito para las plantas de mi casa.

Es probable que tampoco me vean usar es lápiz labial marrón que alguna vez me regalaron, ni encontrarán esa máscara de arlequín colgada en mi casa.

Tomémonos un momento cuando tengamos que comprar un regalo y consideremos los siguientes límites:

NO le compremos una franela del Caracas a un Magallanero…

NO le regalemos un perro a quien no le gustan las mascotas…

NO le regalemos una cena en un restaurante de carnes a un vegetariano…

NO le regalemos unos tacones de aguja a quien siempre anda en converse…

NO le regalemos un pase anual al estadio a quien no le gustan los deportes…

Recibir un regalo no es bueno porque sea caro o exclusivo, es bueno porque alguien se tomó la molestia de pensar en que te pudiese gustar.  Armemos una asociación anónima de “échale coco a tu regalo” cuyo lema sea “Por un mundo sin amigos secretos traumáticos”. Es un trabajo duro pero Superman y Batman no pueden hacerlo todo en esta vida, hay espacio para más héroes silentes ;-).