miércoles, 20 de febrero de 2013

Le da miedo que le duela

Una de las maravillas de requerir un servicio es la cantidad de información que recoges en el proceso. Ir a la peluquería o a hacerse el manicure por lo general involucra escuchar historias ajenas. Hay quienes piensan que ciertos temas deben discutirse en privado, pero cuando dos mujeres trabajan todo el día con público presente, su vida se convierte en un libro abierto para nosotros.

Hoy fui a resolver uno de los problemas más grandes que una mujer afronta: el vello facial! Y mientras me depilaban escuché esto:

Depiladora 1: ¿Y qué es lo que te da miedo?

Depiladora 2: Que me vaya a doler!

Depiladora 1: ¿Pero lo has intentado?

Depiladora 2: No, yo le dije que no quería y se molestó

Depiladora 1: ¿Qué excusa le diste?

Depiladora 2: Que no quería y ya

Depiladora 1: Marica tienes que enseñarlo a que esas cosas se discuten. Te lo digo porque así es Daniel, ese tipo de hombre se molesta y no te escucha.

Depiladora 2: Yo se lo dije

Depiladora 1: Bueno marica pero trata! Si te duele no lo haces más y ya

Depiladora 2: Ay pero es que yo se que me va a doler

Depiladora 1: Ese es el problema con los hombres así! Tiene que ser como ellos quieran! Daniel se molesta y no me habla, pasa el día amargado. Son hombres que reaccionan a lo agresivo. Pero bueno marica inténtalo. Tienes que enseñarlo a que respete tu decisión y tus preocupaciones. Pero trata y ya, de repente te gusta.

Depiladora 2: Si, el se puso bravísimo, pero yo igual le dije que no.

Depiladora 1 hacia mí: estas lista mami.


Y así pues, en 10 minutos supe que el novio de la Depiladora 2 quería algo que potencialmente generaría dolor. Supe también que Daniel ha de haber tenido una inquietud similar. Supe que la Depiladora 1 probablemente accedió a explorar esa inquietud y no le debe haber dolido mucho porque ahora incita a la otra a que lo intente. Entiendo ahora que ambas depiladoras enfrentan el reto de enseñarle a sus respectivas parejas que sus necesidades se discuten en lugar de molestarse. Entiendo también que la Depiladora 1 falló en esa tarea porque Daniel se molestaba al principio y se molesta ahora. Aprendí entonces que el consejo de la Depiladora 1 a la 2 es que se haga escuchar pero que igual trate, que no haga lo que no quiera pero que trate, que no se deje manipular pero que trate.

Parece que todo va bien Daniel!

1 comentario:

Gustavo Enrique Revilla Reyes dijo...

jajajajajja que vaina más graciosa!!!

Claramente se entiende que el esposo de la Depiladora 2 queria probar y depilarle algo a ella, y claro como ella es experta en depilación sabia que le iba a doler... debe ser eso! ;-) jejejjee

Saludos!