sábado, 18 de agosto de 2012

Mi reality show


Los reality show son programas basados en experimentos sociales, donde escogen a un grupo de personas para convivir en un ambiente determinado y documentar sus actitudes. Este formato se ha producido una y otra vez, con diferentes niveles de calidad, pero en general, nos sentimos atraídos por un simple factor de entretenimiento.

Ahora bien, si observan con atención, se darán cuenta de que su grupo de amigos y familiares seguramente tiene personajes con los que pudieran hacer su propio reality, sólo es cuestión de mezclar algunos de estos ingredientes:

1.       El absoluto: defiende sus verdades a capa y espada, hay alguna actividad en su estilo de vida que le apasiona tanto que lo usa de referencia para todo lo demás, intenta contagiar a todos a su alrededor y persiste hasta el final, lo logre o no, él lo intentó.

2.       El imperfecto: persona que sabe que está lejos de ser considerado ideal, de hecho, defiende la imperfección como estilo de vida, está convencido de que cada quien tiene derecho a hundirse o sobresalir como quiera, toda explicación sobre su vida o creencias está demás, total, cada quien debería preocuparse por lo suyo. El imperfecto generalmente disfruta irritar a otros, he allí su mayor fuente de entretenimiento.

3.       El “yo no me meto en ese peo”: generalmente el que está más enterado de todo lo que pasa en el grupo, no se molesta en entrar en debates, pero presta atención a cada detalle, será el único capaz de resolver futuros conflictos porque vio todo imparcialmente, pero seguramente no querrá involucrarse.

4.       El faro: ese que dirige la atención hacia él, alguien que sabe como mantener al resto alerta y evitar los choques, una cualidad altamente necesaria en encuentros multitudinarios.

5.       El “toy y no toy”: ese que no sabe del todo como encajar en situaciones grupales, pocos conocen su voz o forma de pensar.

6.       El “agua tibia”: ni lo uno ni lo otro sino todo lo contrario, alguien que queda bien con todo el mundo.

7.       El Enigma: esa persona que uno no termina de definir, ese que uno nunca termina de saber si es ateo o cristiano, chavista u opositor, buena gente o psicópata.

8.       El “caído de la mata”: esa pared siempre estuvo ahí? Ya me había pegado con ella? Este chichón ya lo tenía?

9.       El Dictador: persona con tendencias totalitarias que siempre está dispuesta a explicarte lo que te conviene, lo que necesitas y lo que debes hacer, aún y cuando tú no te estés haciendo ninguna de esas preguntas.

Advertencia: una persona puede tener varios de estos ingredientes, recuerde usted que toda mezcla debe manejarse con mucho cuidado.

Recomendación: nunca limite su grupo a especies del mismo ingrediente, déjele eso a los zoológicos, usted rodéese de tanta diversidad como pueda, conocer a otras especies hará su vida más interesante  y le mostrará otros puntos de vista, una mente obtusa siempre estará pasada de moda, evítelo a toda costa teniendo en su mezcla tantos ingredientes como pueda.

Ya tienen listo su reality show?

miércoles, 8 de agosto de 2012

Vamos a la nieve!


Bienvenidos a Mt Buller!



Pequeña población a 3 horas de Melbourne donde se practican deportes de nieve, en esta ocasión los protagonistas son 4 integrantes de un equipo Colombo-Venezolano poco menos que listo para lo que está por venir. Por favor conozcan a Gaby Q (una tocaya), Mariana y Fernando, un aplauso para ellos por favor.

La temperatura está a -3 C, nada dramático considerando el sitio. Su narradora intenta caminar y subir escaleras con 3 capas de ropa, incomodísimas botas de nieve y esquíes en los brazos.



En principio pensamos no tomar la lección, pero como estaba básicamente incluida en el precio de la entrada dijimos “Ok, por qué no?”; uno pensaría que una lección de 2 horas es excesiva, pero no no no, fue suficiente para que Gabucha comenzara a entender que quizá esquiar iba a ser una misión imposible.

Etapa 1. Lección

“Hola! Mi nombre es Emil y voy a ser su instructor, vamos a presentarnos………….. tenemos 2 Gabys? Y de dónde son? …. Ohhhh Venezuela?” (cabe destacar que todo Australiano siempre responde “ohhh Venezuela” sepa o no donde queda)

Transcurre entonces la lección y comienzan las pruebas, subir de lado la colinita, con las piernas flexionadas inclinadas hacia el lado donde quieras subir… más caídas en ese grupo de lo que el instructor esperaba…… “ok, quítense los esquíes y mejor se los ponen allá arriba”

“Vamos a bajar uno por uno, deben poner los esquíes en forma de A para ir controlando la velocidad, recuerden que los bordes metálicos ayudan a frenar”

Cayó 1….

El segundo bajo bien…

La tercera ni se movió…

Me toca a mi, a ver cómo es que me…………………………………….. y allá rodé!  ni siquiera me caí, sino que agarre la bajadita a toda velocidad y nunca pude frenar, afortunadamente al final de la fila un alma caritativa se atravesó para servirme de pared y me dice “te tengo!”, tal cual hubiese atrapado el tercer out de un inning.

Y mi tocaya me dice muy espontáneamente “Marica tu eres loca?! Por qué te lanzaste así?”….. es decir, en su mente yo estaba en completo control de esa caída libre! Todo perfectamente calculado!

Segundo intento, nuevamente en caída libre, está vez me llevé unas cuerdas inútiles por el medio y lo que me paró fue el choque contra una niñita de unos 10 años, quien me ve atónita y se quita con cara de “que fastidio con esta gente que choca y se cae”

Acto seguido, una vez que “sabes frenar”, te mandan a subir a una correíta que te lleva unos metros más arriba, no demasiados pero en este caso parecían kilómetros, en la correíta casi me caí también, una vez más alguien me tuvo que enderezar para evitar un accidente mayor.

El instructor dice “Vamos a bajar con cuidado, muy muuuy lentamente, el Venezuelan team por favor espérenme, no bajen solos!”, cosa que denota el talento que estábamos derrochando.

Etapa 2. El Lift (ascensor)

El lift es una maquinita de sillas colgantes que te sube a los diferentes niveles de la montaña, como un tendedero pero de gente.

El procedimiento es que tu te paras, la silla viene y te sienta de una vez, tú subes hasta la próxima estación y allá te bajas rápidamente porque el lift no se va a parar, él sigue dando la vuelta. Un video de ejemplo:



El tema aquí, es que tienes que movilizarte con tus esquíes puestos por la cola y los torniquetes, ya esto era suficiente reto para mí, por lo que no me di cuenta de que mis tres compañeros venían más atrás y yo me iba a montar con otro grupo. Mariana me grita “Gaby nooooo!!!! No te montes todavía”, pero ya yo estaba por montarme y tenía una cola de gente atrás, tratar de salirme fue el equivalente a atravesarme en todos los carriles, ocasionando un total colapso tras de mí, el muchacho que organizaba la cola me enderezaba como podía y me dice “listo pasa!”, y yo “Nooo, yo no puedo pasar todavía!”, “no vas a pasar?”, “nooo”, “quítate los esquíes!”, en movimientos muy complicados logré salir de ese rollo, finalmente la gente empezó a pasar y en ese momento llegó mi grupo, pero ahora no me podía subir sin ponerme los esquíes otra vez, el muchacho ya a punto de asesinarme me da una orden irrefutable: “salte! póntelos afuera y entras otra vez”, cosa que causó una segunda catástrofe porque ahora eran tres los atravesados que tenían que quitarse para esperar que yo diera la vuelta.

Una eternidad después llegué a la puerta, quedamos en fila los que debíamos estar, yo en el extremo y por alguna razón quedé sentada en el medio de la silla! colapsando otra vez todo: “ruédate al extremo!”, “no puedoooo”, aquello fue catastrófico, pararon el lift con botón de emergencia, de alguna manera me rodé y por fiiiin todos nos montamos.

Aquí un video del paseo en lift, cortesía de Mariana Marcano.



Mientras vas en el aire todo es pacífico, que hermosa la vista, que linda la gente esquiando, mira las casitas, etc, pero te vas a tener que bajar… o no? Comienza la crisis colectiva: “nos vamos a bajar?”, “si”, “no!”, “qué? Si o no?”, se acerca la estación “si o no?”, “no sé”, ahí viene el piso…..“bájense!!!!”, mis tres compañeros salieron de forma distinta, unos cayeron, otros no, pero yo evidentemente sabía que no iba a salir de pie, el detalle es que ni siquiera me paré! Mis esquíes tocaron el piso y la silla me escupió, lo que ocasionó que saliera absolutamente acostada del lift, la deslizada me subió chaqueta y todo junto y quedé con la espalda directamente sobre la nieve, el operador de la estación intentaba desesperadamente pararme porque venía el siguiente grupo que me iba a caer encima, pero mis esquíes estaban enredados y no me podía parar, tuvo que remolcarme a un lado, patearme, empujarme, lo que fuera necesario para evitar más colapso!

Se imaginarán que después de todo ese show, era absurdo pretender bajar esquiando, ese plan era un suicidio, así que baje a pie y cuando quise intentarlo más abajo, mis botas tenían demasiado hielo y no encajaban en los esquíes, ni modo, la operación “Gabucha aprende a esquiar” no funcionó, los objetivos no fueron alcanzados, por ahora.

Aquí les dejo un video de mi patética actuación en la nieve.




P.D. Tengo la penosa tarea de anunciarles que se registró una baja en la comunidad Wombat australiana, uno de sus miembros se nos atravesó en el camino y no hubo otra opción. Si usted no sabe lo que es un Wombat, sepa esto, no son animales que respondan al peligro…       

RIP Wombat